domingo, 6 de febrero de 2011

Cítricos en las Rías Baixas

Por Alfredo Ara, paisajista de Casaplanta
 
Dentro de Galicia, el cultivo de los cítricos está restringido a las zonas costeras y de interior con baja altitud, donde los inviernos suelen ser relativamente suaves y el peligro de heladas escaso o nulo. Todos sabemos que el cultivo de naranjos y limoneros es típico de la cuenca mediterránea (Valencia, Murcia, etc.). En las Rías Baixas, atendiendo a los índices bioclimáticos como son las temperaturas medias mínimas, media de las máximas, ausencia de heladas, pluviometría, horas de luz, etc., disponemos de un clima “mediterráneo húmedo” (datos extraídos del libro Bioclimatoloxia de Galicia, de Alejo Carballeira).


Gracias a ello, tenemos la posibilidad del cultivo de estas hermosas especies árboles y arbustos como son por ejemplo el naranjo, limonero, pomelo, lima, kumquat, calamondín, etc.
 





La verdad es que estas plantas se desarrollan, vegetan y fructifican en nuestro clima sin mayores problemas. Solo tenemos que tener en cuenta unos pequeños detalles a la hora de elegir su situación dentro de la huerta o jardín:
  1. Orientación: ha de preverse a la hora de elegir una situación para situar nuestro cítrico, que los extremos de temperaturas mínimas durante el invierno pueden llegar a dañar los brotes jóvenes de las planta si es que descienden de los 0º grados centígrados. Por ello, como norma general, debemos situarlos protegidos de los vientos del norte, que como todos sabemos son los mas fríos durante la estación invernal.
  2. Condiciones edáficas: Los cítricos necesitan terrenos con drenen perfectamente. No soportan zonas encharcadizas, humedales, terrenos muy arcillosos o cualquier situación que provoque exceso de humedad en la zona radicular, ya que son propensos a la pudrición de raíces. Ello provoca crecimientos raquíticos, amarillamiento general de la planta, clorosis e incluso la muerte por inanición.
  3. Fertilización: no son excesivamente exigentes. Si el terreno es medianamente fértil, se realizará un abonado de fondo con algún abono orgánico bien digerido y posteriormente abonados periódicos con algún abono de síntesis especifico para cítricos, que suelen contener además de nitrógeno fósforo y potasio (elementos básicos), otros microelementos como son el magnesio, el boro y sobre todo el hierro. Este último es muy importante dado que los terrenos de nuestra zona suelen ser deficitarios de él. Por ello conviene administrar un complejo como por ejemplo el quelato de hierro disuelto en el agua de riego de 2 a 3 veces al año. Estas enmiendas férricas la podrá encontrar fácilmente en su centro de jardinería habitual. 

1 comentario:

  1. Sí, de bimba y lola, y el anillo también!
    Oye, eres experta/experto en plantas?
    Es para pedirte consejos sobre unas cosas....


    Te seguimos ;)


    G

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